Por Enrique Cruz

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En el último contacto que El Litoral tuvo con el presidente de Unión, Luis Spahn, volvió a mencionar que la venta de Gastón González a la MLS está cerrada, que a Unión le quedarán 3,2 millones de dólares que comenzará a cobrarse desde el momento en el  que el jugador viaje a Estados Unidos y que lo único que no se pudo hacer, fue el seguro para prevenir el riesgo de una lesión, algo que lamentablemente ocurrió en el transcurso del segundo tiempo del partido con San Lorenzo.

La jugada en cuestión, fue cuando Gastón González disputó el balón con un defensor rival tratando de generar al menos un tiro de esquina. El volante tatengue cayó pesadamente al costado del arco de la redonda, prácticamente al lado de los carteles de publicidad y quedó inmóvil.

Foto: Pablo Aguirre

Inmediatamente llegó el doctor Santiago Calvo, quien comenzó a trabajar sobre la rodilla izquierda (que es la afectada) y le avisó a Munúa que no podía seguir. Minutos antes, el técnico tatengue había utilizado la totalidad de la cuota de cambios disponibles.

El futbolista se retiró con evidentes signos de dolor, ayudado por auxiliares, se subió a un coche particular y se retiró del estadio ya con una férula colocada en su pierna izquierda.

Seguramente, se esperará el transcurrir de las próximas horas para ver la evolución y se le practicarán los estudios pertinentes para saber el verdadero grado de la lesión, aunque la preocupación es mayúscula. Inevitablemente habrá que esperar esos estudios, aguardando que las noticias que lleguen sean alentadoras, por el propio González y su futuro, que además le permitirá a Unión un ingreso importante de dinero (es a priori la mejor venta de su historia).

El jugador iba a estar disponible para el partido con Gimnasia, el encuentro en Brasil ante Fluminense (cumplió la fecha de suspensión en Sudamericana por su expulsión ante Junior) y a lo sumo el partido con Defensa y Justicia, porque la partida a Estados Unidos está prevista para los primeros días de mayo.