El presidente municipal de la pequeña localidad de Gilbert, en el departamento Gualeguaychú, deberá permanecer con prisión domiciliaria.

Se trata de Ángel Fabián Constantino, quien fue denunciado por acoso, abuso sexual y laboral y por violación. Ahora, sus víctimas señalaron que no cumplía con las medidas restrictivas de acercamiento, por lo que la Justicia dictaminó su prisión domiciliaria.

Verónica Portillo, la ex pareja del sobrino de Constantino, había expresado  un episodio de violación de las medidas de restricción de acercamiento. La denunciante aseguró que el intendente de Gilbert, Ángel Fabián Constantino, había pasado por el frente de su vivienda con su camioneta, siendo que tiene prohibido acercarse a menos de 200 metros de la propiedad.

Luego de dar a conocer este hecho, su abogado defensor Juan Ignacio Weimberg, junto a la fiscal de la causa, Martina Cedrés solicitaron en el juzgado de Garantías que se dispusiera la prisión preventiva para Constantino. Tras la audiencia correspondiente, el juez de Garantías Ignacio Telenta no accedió a la solicitud, pero dictaminó la prisión domiciliaria para el imputado por tres casos de violencia sexual.

Fuentes judiciales confirmaron  que la medida tendrá vigencia hasta el próximo 29 de mayo, aunque podría extenderse de considerarse necesario.

Antecedentes de Fabián Constantino

Constantino ya infringió las medidas perimetrales dispuestas por la Justicia durante la investigación que lo tiene como imputado. Fue en agosto del 2021 cuando también quedó detenido en su domicilio durante apenas unas horas.

Las víctimas del intendente de Gilbert se manifestaron preocupadas y atemorizadas por la asimetría de poder que ejerce Constantino, quien fue licenciado con goce de sueldo por decisión del Concejo Deliberante, pero que no cumplió nunca. De esta manera el jefe comunal siguió concurriendo con normalidad a la Municipalidad.

Además, la Justicia continúa investigando sus vínculos con la cúpula policial. El comisario Javier Salomón se mostró muy cercano a Constantino, al punto de ser favorecido con la concesión del bar de la Terminal de micros.