Por Redacción EL

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Tras admitir la acusación realizada contra Walter Wettstein, por el femicidio de su expareja Noelia Ochstadt, el juez Pablo Busaniche dispuso la apertura a juicio. Mientras que la fiscalía pretende lograr una condena a prisión perpetua, la defensa espera poder demostrar que al momento de los hechos el hombre no era consciente de sus actos.

El femicidio causó gran conmoción en la pequeña localidad de Humboldt, ubicada a poco más de 60 kilómetros de la capital provincial. La mañana del lunes 27 de enero, cerca de las 7.30, Noelia marchaba en su bicicleta color marrón. Unos metros más adelante pedaleaba su hijo menor, de 7 años, a quien ella dejaría en la casa de sus padres para luego irse a trabajar.

Esta era su rutina durante las vacaciones. El niño esperaría con sus abuelos que se hiciera la hora para entrar a la colonia. Mientras recorrían las calles casi vacías del pueblo, la ruidosa bicicleta de Noelia parecía hacer eco. Madre e hijo hablaban sobre los planes de mudanza, ya que pronto se trasladarían a Pilar para vivir con la nueva pareja de ella.

El estruendo de una escopeta resonó en el lugar, que luego quedó en completo silencio. El niño, que reconoció el sonido, giró y vio a su mamá sobre la calle. Una vecina lo escuchó gritar “¡No, papá!”, para luego lamentarse: “¡Mi mamá, mi mamá!”.

Según quedó plasmado en la acusación, Wettstein había arribado al lugar en su camioneta y tras divisar a su expareja le disparó con su escopeta calibre 16. Acto seguido descendió del vehículo, se acercó al cuerpo ya sin vida de Noelia, la pateó y le sacó la bandolera. Más tarde se entregó en la comisaría: “Maté a mi señora”.

Foto: Archivo El Litoral

“Afecciones mentales”

El fiscal Martín Torres calificó el hecho como “homicidio triplemente agravado, por el empleo de arma de fuego, por el vínculo, y por ser perpetrado por un hombre en contra de una mujer mediando violencia de género (femicidio)”. Wettstein quedó en prisión preventiva, y desde entonces su defensa -actualmente a cargo del Dr. Claudio Torres del Sel- cuestiona su estado mental al momento de cometer el crimen.

De hecho, durante la audiencia preliminar (en la que las partes presentaron las pruebas con las que contarán en el juicio) la defensa aportó nueve testigos para que declaren acerca de las “afecciones mentales” y condiciones psicofísicas de Wettstein. Su intención es probar la inimputabilidad del productor agropecuario.

Mientras tanto, la fiscalía centrará sus esfuerzos en poder acreditar las tres agravantes, especialmente el contexto de violencia de género en el que se circunscribió el ataque, y así lograr la condena a prisión perpetua.

Con la resolución del juez Pablo Busaniche, fechada el 30 de marzo de este año, ordenando la apertura a juicio y la conformación del tribunal pluripersonal que lo presidirá, sólo resta esperar que la Oficina de Gestión Judicial (OGJ) agende el debate.

Testigos

En total, 58 testigos declararán durante el juicio, entre personal policial, peritos y civiles. La fiscalía presentó 49, mientras que la defensa agregó otros 9.

“Agarrame que la mato”

Días previos al femicidio, Wettstein se había enterado de que Noelia tenía una nueva pareja y que planeaba mudarse. “Estaba mal” y lo notaban “incómodo con la idea de que ella tuviera un novio”, aseguraron sus allegados. En voz alta, pero para sí mismo, se lo escuchaba decir cosas como: “Dios agarrame que la mato” y “la voy a matar, le voy a pegar un tiro”. Amenazas que terminaría concretando.