Más de cien testigos serán citados para el juicio oral y público por el crimen del comerciante Julio Oscar Cabal, cometido en septiembre de 2019, en el negocio familiar que tenían en calle Urquiza al 2200. Así lo solicitó la Fiscalía, durante la audiencia preliminar en la que el abogado defensor de Juan Cruz Gambini pidió la libertad, la cual fue rechazada.

 

 

"No hay observaciones en el ámbito formal", dijo el abogado Luis Carlos Rittiner, a propósito de la batería de medidas probatorias que el Ministerio Público de la Acusación (MPA) propuso al juez Gustavo Urdiales, para que sean tenidas en cuenta en un futuro debate oral.

 

 

Más allá de eso, el letrado afirmó que "vamos a sostener la inocencia" de Gambini. "No se va a poder demostrar la autoría" dijo en relación al crimen y desconoció una denuncia de amenazas contra otro comerciante de la zona.

 

Peligro de fuga

No obstante, y teniendo en cuenta la instancia del proceso, el defensor solicitó la libertad para su pupilo para que llegue en esa condición al juicio. "No existen riesgos procesales" apuntó Rittiner, ahora que todo está en manos de la Justicia.

 

Se opusieron los fiscales de la Unidad Especial de Homicidios del MPA, Ana Laura Gioria y Gonzalo Iglesias; en tándem con las abogadas del Centro de Asistencia Judicial (CAJ) de la provincia, Vivian Galeano y María Lucrecia Fernández, quienes representan a María Inés Masino, mamá de Julio, que es querellante en la causa.

 

Brevemente, el juez Gustavo Urdiales, rechazó el planteo defensivo argumentando que la cercanía del juicio y la representación de Gambini de una condena grave como lo es la perpetua, acrecientan el peligro de fuga, entre otros riesgos procesales. "Que se mantenga la cautelar de prisión preventiva del imputado". ordenó.

 

Un centenar de testigos

La audiencia tuvo lugar el pasado viernes en horas de la mañana, en la Sala Nº 1 del subsuelo de los tribunales santafesinos. "Solicitamos la apertura de la causas a juicio", dijeron fiscalía y querella, luego de presentar la evidencia con la cual irán al debate, y que en forma íntegra fue aceptada por el defensor particular.

 

 

Entre los datos salientes, se conoció que serán entre 115 y 120 las personas citadas a declarar, por lo que se espera que sea de los denominados "juicios largos", el cual transcurrirá durante varias semanas y deberá ser agendado por la Oficina de Gestión Judicial (OGJ). La lista está compuesta por 27 policías; 44 testigos civiles; 27 peritos y 13 médicos; además la chica que trabajaba en el negocio donde ocurrió el crimen, los padres de Julio y un "testigo de identidad reservada", entre otros.

 

 

También se fijaron los términos de la acusación, apuntando a Gambini como autor de los delitos de "homicidio doblemente calificado por el uso de arma de fuego y criminis causae" (mató para consumar el robo y lograr la impunidad), consumado contra Julio Cabal y en grado de tentativa para con una empleada que fue testigo directo del hecho. Además, le formularon cargos por una amenaza con arma ocurrida un año antes, en otro contexto.

 

Prisión perpetua

Además, fiscalía y querella adelantaron que solicitarán pena de prisión perpetua, que es la estipulada por la ley para el caso. También expresaron la necesidad de la conformación de un tribunal pluripersonal, en tanto que la fiscalía se comprometió a identificar a un puñado de testigos que todavía no fueron localizados.

 

Como la defensa del acusado no cuestionó la prueba que será incorporada al debate, la fiscalía sólo se detuvo a detallar puntos específicos del escrito acusatorio. Uno de ellos fue la necesidad de mantener la reserva de identidad de un testigo clave, que era menor de edad al momento del crimen de Julio.

 

 

Ese martes 17 de septiembre, el joven pasó en su bicicleta y paró en el semáforo de Urquiza y Salta cuando se oyeron los disparos. En su relato describe "una Motomel plateada sin patente" que escapa hacia el oeste por calle Salta, hasta que lo pierde de vista. El testigo, luego reconoció a Gambini en rueda de personas.

 

 

La fiscalía puso de resalto la importancia de que ese testigo llegue al juicio con la tranquilidad suficiente como para prestar una adecuada declaración. Y para garantizar el servicio de defensa le ofreció al abogado de parte, mantener una entrevista con el muchacho en sede del MPA, en una fecha cercana al evento.

 

Un balazo fatal

Juan Cruz Gambini, quien ahora tiene 26 años, está acusado de haber ingresado a la fiambrería "Almacén del Norte" de calle Urquiza 2215, empuñando un arma de fuego tipo revólver, con fines de robo. Fue a las 13.15 del martes 17 de septiembre de 2019 y en el local estaban Julio Cabal (29) y una empleada. 

 

"Tirate al piso porque te mato", gritó Gambini. La mujer obedeció. Julio se sentó en el piso, desde donde intentó iniciar una discusión, que terminó cuando se le interpuso en el camino hacia la caja registradora. Se oyeron 3 disparos, recordó la empleada, uno de los cuales impactó en el pecho del comerciante, que le afectó el corazón.

 

En la desesperación, Gambini huyó sin nada, dejando caer una gorra acuadrillé, tipo boina con visera. La prenda también resultará clave a la hora de confirmar la presencia del acusado en el comercio, ya que un análisis de ADN detectó que las muestras obtenidas son compatibles con el perfil genético familiar del reo.

 

Mientras el asesino escapaba, la empleada acudió en auxilio de Julio. Le preguntó si estaba bien, él le respondió que sí, pero luego se quejó de la herida y se desmoronó. En medio de la confusión, la chica llamó a la mamá de Julio, que se comunicó con el 911 para pedir asistencia policial y médica. 

 

El primero en llegar fue el padre de Julio. El hombre -también llamado Julio-, lo cargó en una Fiat Fiorino que utilizaban como herramienta de trabajo y lo trasladó al hospital Cullen escoltado por personal de la policía Comunitaria, que con sirenas abrió el paso en un horario pico. Tres horas después, la guardia policial del nosocomio informó de su fallecimiento.  

 

Proceso legal

Pasaron tres días hasta que los investigadores pudieron dar con el sospechoso del asesinato del comerciante. Juan Cruz Gambini fue atrapado el viernes 20 de septiembre en las calles de Villa del Parque, en la misma moto que se presume, usó en el atraco.

 

El 22 de septiembre fue imputado ante el juez Sergio Carraro; y dos días después el juez Luis Octavio Silva le dictó la prisión preventiva. El 5 de noviembre fue la apelación y la cautelar resultó confirmada por el camarista Sebastián Creus.

 

El 1 de junio de 2021 se realizó una nueva audiencia de atribución imputativa en la que se agregó el hecho de amenazas, cometido el 30 de abril de 2018 en Pasaje Cervantes al 4200, contra una mujer, a la que apuntó con un arma de fuego diciéndole "que no lo mire porque la iba a matar".