Por Ivana Fux

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Lo había anticipado en la primera reunión de la Junta Provincial de Seguridad y lo concretó en el segundo encuentro. El Fiscal General Jorge Baclini había advertido el 17 de febrero en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno que desde el Ministerio Público de la Acusación (MPA) promoverían una reforma a la ley vigente para que dejase de ser el poder político quien tuviese la facultad de disciplinar y sancionar a los fiscales. Para Baclini, ello es "inadmisible" e implica un "fuerte condicionamiento" al trabajo de los integrantes del MPA. Baclini lo había dicho en aquel encuentro, incluso, frente al gobernador Omar Perotti; al presidente de la Corte, Rafael Gutiérrez; y a los titulares tanto del Senado – Alejandra Rodenas-, como de la Cámara de Diputados – Pablo Farías-. Eso, a principios de 2022.

El martes, a la nueva reunión de la Junta, Baclini llegó ya con el proyecto redactado para modificar la ley 13.013. Ésa es la norma original que determina la constitución y funcionamiento del MPA; fue sancionada en 2009 y modificada posteriormente - por ejemplo, en 2017- cuando se resolvió que fuese la Legislatura la que tuviese el poder disciplinario sobre los fiscales. Baclini propone, ahora, volver al régimen original que dejaba esa potestad sancionatoria en manos de un Tribunal de Disciplina, similar al que se constituye para juzgar a los magistrados.

Consultado por El Litoral, Baclini fundamentó la iniciativa. "Nosotros presentamos un proyecto para modificar la ley 13013, y cambiar sobre todo, la potestad disciplinaria que hoy tiene la Legislatura sobre las faltas que eventualmente puedan cometer los fiscales. Lo que pedimos es que se vuelva al sistema anterior con algunas modificaciones, que específicamente las proponemos", planteó. El funcionario reparó en un proyecto similar presentado también por el diputado radical Fabián Palo Oliver. "Ese proyecto también nos satisface, pero creemos que el que presentamos nosotros es superador. Lo planteamos para que se haga un estudio y un análisis", dijo.

"Consideramos y lo dijimos enfáticamente que el control sobre los fiscales políticamente es algo que condiciona mucho la actividad fiscal, que ataca y afecta la autonomía; y desde este punto de vista, nos parece que se debe volver a un sistema de control que sea similar al que tienen los jueces, es decir, con un jury de enjuiciamiento".

En el caso del MPA, el Tribunal de Disciplina estaría integrado por un representante del Colegio de Abogados de otra Circunscripción Judicial en que se desempeñe el acusado; un senador y un diputado designados anualmente al efecto por sus Cámaras; por un fiscal regional de una circunscripción diferente a la que corresponde al acusado y designado por sorteo; y por el Fiscal General. Este último lo preside y vota sólo en caso de empate. En tanto que el Auditor General de Gestión cumpliría la función de acusador ante el Jurado.

Consultado sobre su expectativa respecto del ingreso del proyecto a la Legislatura, Baclini adelantó que el texto ya está en manos de los funcionarios del gobierno de Omar Perotti – podrían ingresarlo como proyecto del Poder Ejecutivo-; pero anticipó también harán una presentación tanto ante el presidente de la Cámara de Diputados, como del Senado, para que le den el trámite correspondiente.