Por Nancy Balza

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Empleo, desempleo, trabajo informal, personas que tienen una actividad "en blanco" en el sector privado y aún así son pobres. La catarata de datos e indicadores se sucede y replica en cada hogar, donde la realidad estadística se dirime en el día a día y a la hora de hacer las compras, y difiere en cada región del país de acuerdo a sus propias características.
 

Lo cierto es que las mediciones se hacen período contra período pero también con la pandemia por Covid-19 como línea divisoria. En ese marco, el ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la provincia, Juan Manuel Pusineri, explicó que "hay dos datos que tomamos en cuenta: uno es el empleo registrado que lo proporciona el sistema previsional argentino y nos da que a diciembre de 2021 tenemos mayor cantidad de empleo registrado que en 2019 que es el año previo a la pandemia. Son más de 500 mil trabajadores privados registrados".

El otro dato es el del Indec, que mide la desocupación en general, no solo en el ámbito privado sino también en autónomos, monotributistas, empleo informal y sector público. "Respecto de diciembre de 2020 nos da para Santa Fe 88 mil empleos nuevos". "Estos empleos combinados con la tasa de actividad (gente empleada o que busca empleo) resulta en un nivel de desocupación de 6,3 % en el Gran Santa Fe y 7 % en el Gran Rosario. Hay que ir varios años atrás para encontrar un índice de desocupación de esas características", afirma.

Juan Manuel Pusineri, Ministro de Trabajo.Foto: Manuel Fabatía.

- Si nos quedamos con la primera cifra de mayor empleo registrado, ¿en qué actividades están ocupadas esas personas?
 

- Industria y construcción son los dos que primero registraron trabajadores. Y sobre el segundo semestre de 2021 siguió en servicios, turismo, gastronomía y comercio.
 

- Por otro lado, está ese otro dato que indica que uno de cada tres trabajadores "en blanco" en el sector privado es pobre.
 

- Ese es el otro tema. También hay un esquema de seguir recuperando poder adquisitivo para el salario. En 2018 y 2019 los salarios respecto de la inflación quedaron más de 10 puntos abajo. En 2020 quedaron 2 puntos abajo de la inflación y en 2021 la medición nos da que, por primera vez, el salario se ubica entre 1 y 2 puntos arriba de la inflación.
 

El sendero a recorrer pasa, sin dudas, por seguir recuperando poder adquisitivo. Hay espacio para eso y para otro desafío que es el empleo de calidad.
 

Hoy tenemos un nivel de informalidad en torno al 35 %. Allí también hay un tema que resolver.
 

- Las autoridades sanitarias afirman que estamos desandando el camino de la pandemia, ¿cuáles son las prioridades del ministerio en esta etapa?
 

- En primer lugar, calidad de empleo y para eso hay tres líneas. La primera es la inspectiva que hay que retomar en sectores que se recuperaron de la pandemia. En ese momento se priorizaba que se pusieran en funcionamiento y ahora tuvieron tiempo para trabajar y es tiempo de ver en qué condiciones están los trabajadores de cada uno de los sectores a través de la inspección laboral.
 

Otra línea es con programas de capacitación y de empleo formal registrado que se conoce como Primer Empleo. Ese plan financia el empleo privado registrado; cambiamos la concepción del subsidio al desempleo por un subsidio al empleo. Para ello hay un aporte al empresario que ocupa a un joven y la provincia se hace cargo del 85 % del salario mínimo, vital y móvil durante un plazo de seis meses.
 

La tercera línea es la mesa de diálogo entre el sector empresario y el sector sindical.
 

Pero el de calidad del empleo es uno de los desafíos más importantes además de las temáticas tradicionales como resolución de conflictos y de paritarias.