Por Lía Masjoan

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La foto de una inspectora municipal colocando alcohol en las manos de los ocupantes de una moto antes de ingresar a la playa de la Costanera Este despertó la polémica en las redes sociales de El Litoral. Y claro, no pasó desapercibido en la audiencia que el vehículo no tenía chapa patente y ninguno de los jóvenes que en ella circulaba llevaba casco ni barbijo.

Más allá de la situación particular, el problema de fondo es que este tipo de infracciones se observa con frecuencia en las calles de la ciudad. Y ni hablar de que el semáforo ya no existe para muchos motociclistas (ni ciclistas). La pregunta obligada es ¿y los controles?

Virginia Coudannes es la Secretaria de Control y Convivencia Ciudadana de la Municipalidad de Santa Fe. En diálogo con El Litoral explicó qué sucedió en este caso particular, y lo puso en contexto de acuerdo a los operativos que realizan habitualmente, bajo la premisa de promover "el buen comportamiento de la gente que transita por la ciudad" en cualquier tipo de vehículos, "y el apego a las normas".

La funcionaria explicó que en este caso se trataba de un punto fijo sanitario a cargo de personal de la GSI, que no tiene la facultad de multar ni de retener vehículos. Sí puede articular con los inspectores, "pero nosotros ya hacemos controles en muchos puntos de la ciudad, incluso ahí venimos haciendo específicamente de motos con acompañamiento de policía que está en el lugar, caminantes y motorizada, y los vamos a continuar haciendo, pero por lo general los hacemos cuando vuelven de las playas".

Algunos números

Los operativos que realiza el municipio se dividen en dos grupos: los de control ordinario de documentación para circular, en el que se piden los papeles, etc.; y los de accesos por emergencia sanitaria, con fuerzas federales y policía. En total, desde el año pasado se han hecho unos 2000 operativos (1200 del primero y 800 del segundo).

"En esos operativos ya hemos retenido 2400 motos por distintas infracciones, la mayoría por falta de documentación, patente, licencia vencida; y más 400 autos, sumando taxis y remises", aportó Coudannes.

En estos meses de verano se está implementado otro operativo en la ruta 1 con la Agencia Provincial de Seguridad Vial (APSV) que incluye alcoholemia "porque es un corredor con turismo de proximidad que se está utilizando mucho, y nos está dando muy buenos resultados", remarcó la funcionaria.

La premisa a la que adhiere es que un municipio presente promueve el buen comportamiento de la gente que transita y el apego a las normas. "El control es cuidado, siempre planteamos todo desde ahí. Queremos fomentar otro uso del espacio público y convivir de otra manera, respetándonos el uno con el otro cuando estamos en la calle", amplió. En ese marco se inscriben los programas de senderos seguros en la zona de boliches, que funcionaron el verano pasado; y calles recreativas.

Concientización y control

Durante los primeros meses de gestión, "habíamos definido que la seguridad vial era la primera cuestión a trabajar y habíamos arrancado a diseñar un plan de concientización para motos, siempre acompañado con el control, para empezar en marzo. Y no pudimos por la pandemia, pero lo tenemos listo", aseguró Coudannes.

El año pasado, el aislamiento de los primeros meses de pandemia redujeron la circulación en las calles, y con ello los siniestros viales. Así quedó registrado en las guardias médicas, en especial en el hospital Cullen que es donde llegan los accidentados. Pero a medida que se levantaron las restricciones, la ocupación de camas críticas asociadas a accidentes de tránsito comenzó a preocupar a las autoridades de Salud.

Las motos siguen siendo un problema grave, en especial porque no respetan casi ninguna norma de tránsito. Tal es así, que el municipio está trabajando la problemática en la ciudad junto a la Agencia Nacional de Seguridad Vial y con el asesoramiento de la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud (OMS/OPS). "Ellos validan o no nuestras medidas. Una de las acciones que estamos planificando es tener una oficina itinerante dedicada específicamente a las motos para fomentar la prevención y asesorar con información", cerró la funcionaria y prometió que pronto se difundirán más detalles.

Multas por restricciones

La secretaria de Control explicó que aplicar las multas por incumplimiento de la nueva restricción nocturna no competen al municipio, sino que las hace la policía de la provincia, que traslada el vehículo a la comisaría. Luego, interviene un fiscal, que empieza a tomar parte en el procedimiento y es quien determina la pena.