Considerando al paisaje como una construcción sociohistórica, proponen generar acciones sostenibles para revalorizar los recursos naturales y culturales. Con ello, mejorar las condiciones de vida local, favoreciendo la sustentabilidad de los humedales (lagunas y su entorno) y la preservación del patrimonio cultural, con la visibilización de las diferentes historias que cuentan la presencia de sitios arqueológicos, históricos y paleontológicos.